Aquí os dejamos una receta sabrosa, fácil y con un toque tradicional y original: Muslos de Pollo con Dulce de Membrillo.
Es un plato con contraste dulce-salado, ideal para sorprender en una comida familiar o una ocasión especial.
INGREDIENTES (para 4 personas):
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4 muslos de pollo (pueden ser enteros o deshuesados)
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1 cebolla grande, en juliana
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2 dientes de ajo, picados
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150 g de dulce de membrillo (artesano, mejor si es de calidad)
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200 ml de caldo de pollo
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100 ml de vino blanco seco
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1 cucharadita de pimentón dulce
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1 ramita de romero o tomillo fresco
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Aceite de oliva virgen extra
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Sal y pimienta al gusto
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Opcional: un puñado de almendras tostadas o nueces para decorar
ELABORACIÓN:
Dorar el pollo:
Salpimenta los muslos de pollo al gusto. En una cazuela grande o sartén honda, añade un buen chorro de aceite de oliva y dora el pollo por ambos lados hasta que esté bien sellado. Retira y reserva.
Sofreír las verduras:
En la misma cazuela, añade un poco más de aceite si es necesario y sofríe la cebolla y el ajo a fuego medio hasta que estén dorados y tiernos.
Incorporar el membrillo:
Agrega el dulce de membrillo cortado en dados y remueve hasta que se derrita con el calor. Añade el vino blanco y deja que reduzca el alcohol unos 3 minutos.
Cocinar el pollo:
Vuelve a colocar los muslos de pollo en la cazuela, añade el caldo, el pimentón y las hierbas aromáticas. Tapa y cocina a fuego medio-bajo durante unos 35-40 minutos, hasta que el pollo esté tierno y la salsa haya espesado ligeramente.
Acabado y presentación:
Si deseas, añade un puñado de almendras tostadas o nueces picadas justo antes de servir para un toque crujiente. Acompaña con arroz blanco, puré de patata o cuscús.